martes, 5 de noviembre de 2013

Carta para los alumnos de mi profesora

Carta de una ex-alumna 

La importancia del profesor no es valorada hasta que la madurez crece en nosotros y nos planteamos la vida y un futuro. No nos damos cuenta de que en realidad no son ogros ni personas que intentan hacernos la vida imposible, ni mucho menos que nos tienen manía. Son personas que intentan formarnos para tener un futuro mejor, y para que lleguemos a ser grandes profesionales con una educación. Esta educación no es enseñada en el colegio o instituto sino también hay que venir con ella aprendida de casa. Se pueden formar personas que el día de mañana sean grandes médicos, policías, abogados… pero esa es la parte secundaria ya que la verdadera educación y la que realmente importa es la educación en valores que tenemos que aprender en casa y en el colegio, los valores de ser una buena persona y responsable. 

Ahora muchos no os daréis cuenta de lo que realmente os estoy diciendo y diréis que estoy loca o algo de eso, pero al igual que vosotros también he estado ahí con los mismos profesores. No soy un ejemplo a seguir, ya que como decía mi madre, siempre estaba metida en todos los charcos, he discutido con profesores igual que muchos de vosotros, pero realmente con el tiempo y los años te das cuenta de que gracias a ellos eres una persona que el día de mañana dará clases a los que pueden ser vuestros hijos, con esos valores que me han transmitido nuestros profesores. Si nos regañan es por nuestro bien, al igual que si nos castigan o nos suspenden, ya que ven que no estamos preparados en ese momento para seguir y solo tratan de que aprendamos de los errores. 

Solamente quería escribiros esto, ya que muchas veces vuestra profesora que en estos momentos está leyendo esto, me ha insistido mucho en que os escriba. Nadie es perfecto y habrá profesores que por vuestra forma de ser os caerán mejor o peor, pero nunca olvidéis que quieren que maduremos tanto en lo profesional como en lo personal. 

Exalumna del colegio Villalkor

1 comentario:

BiciParla dijo...

He de admitir que hace relativamente poco me encontré con una profesora de Lengua Castellana del colegio. Creo que no me había dado cuenta hasta entonces del importante papel que jugó.

Saludos